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2 junio 2023«Oír ruido para no pensar»
Esa es la frase con la que me respondió mi padre la semana pasada, cuando llamé por teléfono y, al escuchar una música que interfería su voz, le pregunté: «Papá, ¿por qué escuchas esa música tan rara?».
«Para que haga ruido y no pensar», me respondía.
Esa contestación me llegó al alma, por 2 cosas:
1.- Porque, que mi padre diga eso es significado de que tiene mucho tiempo para pensar; tiempo que le viene sobrevenido por la situación de salud que viene arrastrando desde hace un año, en el que ha tenido que bajar su ritmo de hacer cosas. Y es que mi padre ha sido una persona superactiva , con mente que no paraba de idear, crear y hacer. A sus 80 años, tiene un «coco» privilegiado, pero su cuerpo no le acompaña: su corazón le ha dado un ultimátum, lo que le ha llevado a tener que dedicarse a «esperar», sentado. Y esto, por consecuencia, le lleva a tener mucho tiempo para pensar y darse cuenta de que el final se acerca y la vida se acaba.
2.- Porque es consciente de que la mente es «su peor enemigo» y, en este momento de vida, no quiere «enemigos», quiere vivir en paz, por ello decide «oír ruido» (que silencie, en cierto modo, su mente).
Permitidme que os cuente esto para hablar sobre un tema que miles de personas experimentan, reproduciendo este patrón, como mi propio padre.
Efectivamente, nuestra mente puede ser nuestra mejor aliada o nuestro peor enemigo.
A lo largo de los años que vengo trabajando con personas a nivel individual, he visto a muchas personas sufrir por no saber «parar la mente».
Y es que la mente, si no la tienes bien entrenada, te «vuelve loco/a».
Hay estudios que dicen que tenemos más de 600.000 pensamientos al día. Lo que sucede es que la mayoría de las personas, funcionamos en piloto automático la mayor parte del tiempo y no somos conscientes ni de lo que pensamos, ni de cuánto pensamos, ni de cómo pensamos, por lo cual, no sufrimos.
Y es que el sufrimiento llega cuando somos conscientes de lo que pensamos y no somos capaces de saber qué hacer con ello.
Justo lo que sé que mi padre está viviendo en estos momentos de vida. Gracias a tantos momentos de sosiego y estado «mindfulness», ve pasar todos sus pensamientos y, entre ellos, esos que le recuerdan que ya no puede hacer todo lo que hasta no hace mucho hacía, dándose cuenta de su realidad actual, la que le está costando horrores aceptar.
Y esto le sucede a mucha gente: van en el coche, salen a correr, se duchan, cocinan, etc., y mientras ponen la radio o la música, entran en redes sociales, o llaman a alguien, para evitar quedarse «solos consigo mismos».
«Tienen miedo a escucharse», pues en el silencio y soledad, es cuando tomas consciencia de tu realidad, realidad que en muchas ocasiones no es nada agradable, por tratarse de situaciones o aspectos de tu vida que no quieres «mirar de frente», porque te hacen sufrir.
Pero eso es justo lo que no hay que hacer: «buscar ruido para no pensar». Lo único que conseguimos es «aparcar el dolor», que no significa transitar el dolor.
Transitar el dolor es la verdadera forma de no sufrir.
Por ello, ante este tema que hoy te presento, te invito a preguntarte:
¿En cuántas ocasiones conectas la radio, la televisión o simplemente, acudes a llamar a gente, para evitar pensar?
Si eso te pasa, cuestiónate: ¿qué es lo que no quiero ver o escuchar? ¿A qué le tengo miedo?
Cuando te hayas respondido, no te quedes con las respuestas tú solo/a, trabaja en eso que se te ha presentado delante y si necesitas ayuda pídela, pero «no pongas la radio para no escucharte», ni tampoco tapes lo que has escuchado,
Ventila lo encontrado.
¿Te identificas con lo que has leído? ¿Te gustaría perder el miedo a escucharte, aprender a tomar consciencia de tu realidad y emprender el camino hacia el cambio que te haga sentirte satisfecho/a con tu vida y tus relaciones personales?
Yo puedo ayudarte info@encarnateruel.com